“Un sueño cumplido”, así define el doble finalista olímpico la creación de este nuevo espacio que busca entregar no sólo la posibilidad de entrenar, sino que también formar a los deportistas del futuro a través de métodos utilizados en la gimnasia artística y que permiten aumentar el gusto por el deporte, la responsabilidad y la disciplina tanto deportiva como personal.
El gimnasio, emplazado al interior de la Ciudad Deportiva de Iván Zamorano, mide aproximadamente 750 m2, y cuenta con equipamiento de primer nivel donado por Leonardo Farkas para la preparación de Tomás en los Juegos Olímpicos de Londres, además de instrumentos elegidos personalmente por el gimnasta que incluye línea metodológica para los más pequeños y equipamiento especial para mujeres.
Más de 25 años de carrera deportiva y el esfuerzo de toda una vida, son la gran motivación de Tomás para abrir a la comunidad este Centro Deportivo que tiene como objetivo entregar una preparación diseñada para generar conductas que tiendan a promover la actividad física a través de los principios físicos, técnicos y metodológicos de la gimnasia artística, “nuestra idea es generar nuevos espacios deportivos para todos, sin distinción de edad, sexo y capacidad. Queremos incentivar principalmente a los niños para que dejen el sedentarismo de lado y para eso hemos adecuado nuestro gimnasio con elementos especialmente seleccionados pensando en ellos”.
La metodología utilizada busca reforzar valores como la superación, voluntad, disciplina y responsabilidad, que son fundamentales para lograr un buen entrenamiento físico y está diseñada de acuerdo a la edad del alumno y las condiciones físicas que se presentan durante su desarrollo. Es así como las clases están orientadas desde niños de 3 años, donde lo fundamental es el desarrollo de la psicomotricidad, pasando por niveles de iniciación, formación y recreación, hasta el nivel avanzado para deportistas que buscan entrenar para enfrentar futuras competencias.
Más información en www.centrodeportivotomasgonzalez.cl
Publicado por Daniel Arellano
Fuente y foto: Prensa Tomás González