Luego de una exitosa Maratón de Santiago, en la cual se dieron cita alrededor de 22.000 personas (entre categorías de maratón, media maratón y 10 kilómetros), marcando todo un récord para este tipo de actividades deportivas, es que he querido contarles un poco sobre quien ya es una figura emblemática de este tipo de pruebas. Me refiero a Erwin Valdebenito.
Nacido en 1964, se hizo conocido por diversos reportajes de la prensa que mostraban su diario recorrido desde su casa en San Bernardo hasta su trabajo en el Instituto de Normalización Previsional (INP), el cual queda en el centro de la ciudad de Santiago. ¿Cual es la gracia? Que ese recorrido de 23 kilómetros lo realizaba trotando. Serian ustedes capaces de hacer algo así para llegar a sus trabajos? (tanto de ida como de vuelta).
Pero eso fue la punta del iceberg, ya que Valdebenito (de polera amarilla en la foto) se haría conocido como un competidor especialista en largas competencias, no solo maratones, sino que de desafios mucho más complicados, como las ultramaratones.
En el año 2007 logró un record Guiness al trotar 248 kilómetros sobre una trotadora estática, en un lapso de 24 horas, evento que fue cubierto por toda la prensa y que sirvió para que Valdebenito llamara la atención sobre los deportistas discapacitados. Mismos deportistas a los cuales ha ayudado, siendo incluso el lazarillo de Carlos Calixto, maratonista ciego, con quien incluso participó en la tradicional maratón de Nueva York.
Desde mi punto de vista, creo que gente como Erwin Valdebenito son de esos ejemplos a seguir. Quizás no en irse trotando a la oficina, pero si en el esfuerzo, la solidaridad, en no darse nunca por vencido. Es un poco lamentable el que Erwin no cuente con más apoyo, tanto del Estado como de la empresa privada, ya que se lo merece, por todo lo que nos ha entregado no solo como deportista, sino que también como persona.
Escrito por Daniel Arellano
Una respuesta a «El corredor incansable»
Excelente título, Daniel.
Es realmente el corredor incansable.