Terminó el Masters 1000 de Roma con Nicolás Jarry (24 ATP) quedándose con el subcampeonato del torneo italiano tras caer en la final por 4-6 y 5-7 ante un sólido Alexander Zverev (5 ATP).
El encuentro arrancó de manera pareja, con un Zverev mostrándose solido con su servicio y sin darle opciones de quebrar a Jarry. El chileno, en tanto, pasó algún susto en el octavo juego, cuando debió sacarse dos puntos de quiebre.
El trámite hacía presagiar que el parcial se definiría en el tie break, pero el tenista alemán dijo otra cosa.
Los errores no forzados de Jarry aparecieron en el peor momento posible, lo que aprovechó Zverev para quebrar y ganar el primer set por 6-4.
El alemán no bajó su nivel y se mantuvo firme con su servicio, complicando al chileno, quien en el cuarto juego tuvo que extremar recursos para levantar un 15-40 en contra.
Zverev no daba chances con un tremendo primer servicio, el cual le funcionó a tal nivel que cedió pocos puntos con el.
Jarry no solo no tenía opciones de quiebre sino que también debía zafar de momento complejos como los dos puntos de partido en el décimo juego, tras encajar dos dobles faltas.
En el duodécimo juego se acabó la resistencia de Jarry, quien cedió su saque en la cuarta oportunidad que Zverev tuvo de ganar el partido. El alemán timbró un 7-5 que le entregó un nuevo título en torneos de categoría Masters 1000.
Se cierra así una gran semana para Jarry, quien no partió bien su temporada en arcilla. Con lo realizado en Roma subirá hasta el lugar 17 del ranking de la ATP, anotando su mejor ubicación histórica.
Tras un cambio en su calendario, Jarry tendrá una semana sin disputar torneos, preparándose para Roland Garros, el segundo Grand Slam de la temporada, el cual comienza el próximo domingo y donde el chileno será uno de los sembrados.
Escrito por Daniel Arellano
Foto: Instagram Team Chile