No es desconocido que el fútbol femenino en esta parte del mundo, recién comienza a aplicarse de tal forma que se vea igual que cualquier disciplina deportiva, con la seriedad que se merece y el profesionalismo que lo debiera rodear. De un tiempo a esta parte, puntualmente en Chile se comenzó a vivir el ‘boom’ del balompié de damas.
Desde aquel año 2008, cuando nuestro país fue sede del mundial sub 20 se ha crecido bastante en nivel de juego y de responsabilidad humana para con este deporte.
Sin embargo, cuando pensábamos que se comenzaba a nivelar hacía arriba, nuestro fútbol nos sorprende con dos mazazos de machismo, irresponsabilidad y poco respeto con quienes practican el deporte rey, que en este caso es protagonizado por reinas y princesas que día a día luchan por sus sueños y anhelos, con escaso apoyo, pero que al fin y al cabo les sirve para avanzar en la larga tarea que conlleva ingresar al mundo del fútbol femenino en Chile.
Decenas de jugadoras vieron como cerraban distintas ramas femeninas por culpa de Sociedades Anónimas que se tomaron el fútbol para lucrar y dejar de lado el verdadero espíritu del deporte, la unión, el compromiso y la distracción que podemos observar en el fútbol masculino, cuando desde niños las posibilidades para cadetes de cumplir sus sueños son enormes.
En las primeras semanas del mes de enero, pudimos observar como uno de los clubes insignes del torneo femenino chileno dejaba de lado a quienes los representaban con tanto orgullo y respeto ante los demás rivales. Ese mismo respeto no fue reflejado en el trato de una S.A. al cerrar una rama femenina por temas financieros, siendo que ese grupo de chicas son quienes menos recursos se llevan del club. Audax Italiano con el verso de «reducción de gastos» a dos meses del inicio de una nueva temporada dejó a cerca de 60 jugadoras sin desarrollarse en el mundo del fútbol, ese mismo club que gracias al fútbol femenino tiene un estadio de primer nivel, ya que el gobierno le remodeló la cancha que tenía en La Florida para que fuera sede del mundial del 2008 albergando nada más ni nada menos que la final de fútbol femenino sub 20. Ese mismo club, que refuerza constantemente la selección nacional y se llena de buenas palabras en los momentos de éxitos, le da la espalda a esas jugadoras que deben trabajar para costearse pasajes, alimentos y todo lo que conlleva representar sus colores.
Pero las malas noticias para el fútbol femenino no se estancaron ahí, y esta semana Unión Española, citó a las jugadoras a un entrenamiento, hasta ahí todo normal, ya que volverían a los trabajos ambas categorías hispanas para realizar la pretemporada antes del inicio del Apertura. Sin embargo, al llegar al recinto de entrenamiento, la dirigencia informa a sus jugadoras que en ese momento dejaba de existir la rama femenina del equipo de Independencia. ¿Los motivos?, no los dieron, palabras escuetas sin un fundamento claro que sólo quedó en el encargado del encargado de dar la noticia que las sociedades anónimas una vez más manchaban el verde césped: «Unión Española no las tiene consideradas para este año» fueron la explicación ante un manto de dudas. Nuevamente más de 60 chicas quedaban en libertad de acción y todo el esfuerzo de años se disipaba gracias a la avaricia de las sociedades anónimas que manchan el fútbol.
Pero no quedaría sólo ahí, ya que la solución de los altos mandos de Unión Española fue invitar a aquellas jugadoras, a participar en la escuela de fútbol femenino que realizarán a partir de marzo, la cual no participará profesionalmente en el torneo federado y a la cual deberán pagar una mensualidad para formar parte de la misma. Es decir, el fútbol femenino no estaba generando dinero de forma profesional, así que decidimos lucrar con los sentimientos de decenas de niñas que solo quieren jugar.
Comienza el año 2016 y en el primer mes dos equipos importantes del fútbol femenino, escudándose detrás de Sociedades Anónimas y lucro, apuñalan por la espalda a quienes trabajan exclusivamente para que el fútbol femenino crezca y de una vez por todas, en Chile y Latinoamérica logremos la equidad de género que tanto dicen luchar pero que a larga es sólo un bálsamo para acallar a las masas.
Escrito por Ignacio Barría, Gentileza Fútbol Pasión Femenina
Publicado por Daniel Arellano
Foto: Gentileza Fútbol Pasión Femenina