Hoy puede parecer algo casi imposible, pero hace 70 años atrás Chile formó parte de un Mundial de Básquetbol Masculino, alcanzando, incluso, un lugar en el podio.
En 1950 se disputaba el I Mundial de la disciplina el cual se llevó a cabo en la ciudad de Buenos Aires, Argentina, entre el 22 de octubre y el 3 de noviembre de ese año, el cual contó con la participación de 10 selecciones, incluyendo a Chile.
Los equipos que participaron fueron Estados Unidos, Francia y Brasil, quienes habían obtenido el podio en los Juegos Olímpicos de Londres 1948; Egipto como campeón europeo de 1949; Italia y España, quienes ganaron su cupo en el clasificatorio europeo realizado en Niza en 1950; Argentina como organizador; Ecuador como invitado, Uruguay como campeón del sudamericano de 1949 y Chile como tercero del subcontinente (Brasil, que fue segundo, ya estaba clasificado por su actuación en Londres).
Doce fueron los jugadores nacionales que conformaron la selección nacional que participó en el torneo: Juan José Gallo, Hernán Ramos, Luis Marmentini, Eduardo Cordero, Víctor Mahana, Exequiel Figueroa, Mariano Fernández, Rufino Bernedo, Pedro Araya, Raúl López, Marcos Sánchez y Juan Ostoic, siendo dirigidos por Kenneth Davidson.
Arriba: Raúl López (39), Hernán Ramos (31), Víctor Mahana (34), Exequiel Figueroa (35), Juan Gallo (30), Eduardo Cordero (33)
Abajo: Luis Enrique Marmentini (32), Marcos Sánchez (40), Rufino Bernedo (37), Pedro Araya (38), Mariano Fernández (36) y Juan Ostoic (41)
El día 23 de octubre, la segunda jornada del Mundial, comenzó la participación chilena. Al frente estaba un poderoso rival, como Estados Unidos.
Gallo, Cordero, Mahana, Figueroa y Bernedo fue el quinteto nacional que entró a la cancha del Luna Park, ante 18000 personas, para su debut en un torneo Mundial.
Si bien en el papel era un encuentro de David contra Goliat, Chile se plantó de igual a igual al punto que logró generar un partido más equilibrado de lo que esperaba en un principio, según comenta la Revista Estadio en su número 389. La paridad en el juego se reflejó en el marcador, al punto que el primer tiempo terminó con una ventaja de 20-19 para Estados Unidos. Chile logró emparejar el marcador en más de una oportunidad durante el segundo tiempo, aunque el triunfo terminó en manos de los estadounidenses por un estrecho 37-33.
Punto clave en el primer partido fue la gran cantidad de faltas que fueron cobradas al equipo nacional. «Una apreciación errada del arbitro francés, que actuaba en pareja con el argentino, aumentó los fouls a los nuestros, al estimar que la infracción en la marcada era del que defendía, permitiendo al que llevaba la pelota que entrara usando codos o el cuerpo«, indicó la Revista Estadio. Esto llevó a que Chile debió jugar con reservas durante 10 minutos, aunque quienes entraron a reemplazar a sus compañeros estuvieron a la altura y dieron dura batalla en la cancha. La actuación dejó buenos comentarios de los especialistas, destacando la figura de Rufino Bernedo quien se alzó como el máximo anotador nacional con 9 puntos.
Por haber perdido ante Estados Unidos, Chile pasó a una etapa de repechaje, donde su primer encuentro fue ante Yugoslavia, el 24 de octubre.
Este fue el partido más fácil que tuvo el equipo nacional, llevándose el triunfo por un marcador de 40-24. Los máximos anotadores fueron Rufino Bernedo y Víctor Mahana, con 9 puntos cada uno.
El triunfo ante Yugoslavia le permitió a la Roja pasar a la segunda fase del repechaje, donde debió enfrentar a su similar de España. Los europeos fueron un rival más complicado que Yugoslavia, principalmente por el juego físico que buscó imponer el cuadro ibérico. Pese a esto, Chile pudo sacar adelante el partido y llevarse el encuentro por 54-40 con Bernedo nuevamente alzándose como la máxima figura nacional, con 17 puntos. El triunfo le permitió instalarse al equipo nacional en la ronda final del torneo.
CHILE EN LA RONDA FINAL
La etapa decisiva contó con la participación de 6 equipos: Argentina, Brasil, Chile, Estados Unidos, Francia y Egipto. Se realizó una ronda de todos contra todos, de la cual saldría el campeón.
El comienzo fue promisorio para Chile, tras derrotar a Francia por un estrecho marcador de 48-44, en un partido donde los nacionales fueron superiores en el primer tiempo (27-19) pero se vieron complicados en el segundo (21-25). De todas maneras, el triunfo quedó en manos de la Roja.
Sin embargo, el cansancio comenzó a pasar la cuenta en los jugadores nacionales, algo que se vio en el segundo partido, cuando se enfrentó a Argentina, equipo que recién disputaría su tercer partido y que, además, había tenido seis días de descanso entre el debut y su partido anterior ante Brasil.
«La superioridad de Argentina se grabó en todo aspecto y desde las primeras escaramuzas. Los argentinos atacaron el cesto sin dilación, resueltos, atléticos y veloces. Se fueron derecho, mientras los chilenos tomaron un vaivén lento para superar una defensa bien plantada que sólo podía rebasarse con velocidad y puntería. El juego se mantuvo casi siempre en el terreno chileno y en cada movimiento, en cada salto y en cada esfuerzo imperaban el brío y la chispa de los argentinos. Estaba apagado el conjunto chileno. Bernedo y Gallo eran como sombras de los jugadores notables de otras noches. Los rebotes pertenecían todos a los rivales; la marcación, floja e incompleta: la reacción, atrasada, y los lanzamientos, con peor puntería que otras veces. Y Argentina, ante un rival manso, creció, mandó e hizo lo que le vino en gana. Y lució notablemente. Furlong desparramó toda su calidad insuperable, es todo un astro; Ricardo González, Menini, Contarbio, López y Viau descollaron y le ofrecieron a su inmensa hinchada una satisfacción enorme«, escribía desde Buenos Aires, para Revista Estadio, Don Pampa.
El triunfo fue por un claro marcador de 62-41 a favor de Argentina. Pedro Araya fue el máximo anotador con 13 puntos.
En su tercer encuentro por la ronda final, Chile volvió a enfrentarse con Estados Unidos. Los norteamericanos mostraron su superioridad y se llevaron la victoria por 44-29.
El cuarto partido de esta etapa enfrentó a Chile y Brasil. En un disputado partido, el equipo nacional sumó su segundo triunfo en el sextangular tras imponerse por 51-40, nuevamente con Rufino Bernedo como gran figura, al marcar nada menos que 26 puntos para la Roja.
Para el cierre, Chile se enfrentó a Egipto, cayendo por un estrecho 40-43. Tras irse en ventaja al descanso por 19-18, la Roja cedió el segundo parcial por 21-25, sumando su tercera derrota en la ronda final.
La derrota ante Egipto complicó en algo las cosas para Chile en la tabla, ya que se esperaba confirmar el tercer lugar en la cancha. Sin embargo, fue la calculadora la que le terminó entregando el tercer lugar a nuestro país. ¿Cómo fue esto?. Sucede que tanto Chile como Brasil y Egipto igualaron en puntaje, por lo que se debió usar la diferencia de puntos considerando los partidos que jugaron entre ellos. Chile había derrotada por 11 puntos a Brasil y perdió por 3 con Egipto, logrando una diferencia de +8. De esta manera, la Roja superaba a Brasil (+3) y Egipto (-11), quedándose con la medalla de bronce.
Días más tarde, en declaraciones a la Revista Estadio, Bernedo indicó que fue clave la derrota ante Estados Unidos, que los obligó a jugar el repechaje y a tener menos descanso. «Ese primer match con Estados Unidos debió ser nuestro. Verdad es que nos perjudicó el arbitraje del francés, pero, más que eso, la victoria se nos fué por falta de fe en ganar. Nos sorprendimos cuando nos dimos cuenta que estábamos jugando mejor que el gigante. Que lo podíamos ganar. Y esa posibilidad nos puso nerviosos y no nos permitió seguir en el ritmo eficiente y veloz que. ejecutamos. Hasta ese momento jugábamos muy bien, con alegría. Pero en cuanto notamos que podíamos vencer, ya no fuimos los mismos. Faltó fe en nuestra propia capacidad«, indicó la gran figura chilena.
«Hay una debilidad de nuestro equipo: nos faltan hombres grandes en el ataque que peleen y saquen los rebotes y hagan pesada la labor a la defensa contraria. Por otra parte, necesitamos más fogueo internacional, más frecuentes compromisos con equipos de otras características. Y. además, mantener un solo cuadro, que no haya cambios fundamentales, la misma base para que se ajuste una coordinación sólida. Ya ven, Argentina, lo mismo Uruguay, se baten con la misma gente hace cuatro o cinco años«, declaraba Exequiel Figueroa.
En las declaraciones de los jugadores a Don Pampa, también existe una queja no menor, sobre la diferencia entre la preparación chilena con la de Argentina, equipo que a la postre se quedó con el título: «Argentina ganó muy bien y su cuadro estaba en gran estado. Para lograrlo lo tuvieron todo. Cuatro meses de entrenamiento de conjunto, de los cuales dos encerrados; dispusieron de todas las comodidades imaginables. Nada les faltaba. Estaban concretados sólo a eso. ¡Qué diferencia con nosotros! Entrenamos en Santiago tres veces a la semana en las noches, después que cada uno cumplía con su trabajo y sus obligaciones. Algunos como Ramos y Galló, oficiales del Ejército que están haciendo un curso de educación física, en el día se pasaban haciendo deporte. No se podía pedir que soportaran bien los ocho partidos en doce días. Ni de fierro que fueran«.
Así se cerró la primera participación de Chile en un Mundial de Básquetbol Masculino, en lo que sería el inicio de una gran década para la Roja, donde también sumó un destacado quinto lugar en los Juegos Olímpicos de Helsinki y una nueva medalla de bronce en el Mundial realizado en nuestro país en 1959. Pero esas historias serán para una próxima oportunidad.
CAMPAÑA DE CHILE EN EL MUNDIAL DE BÁSQUETBOL 1950
Ronda Preliminar II
23/10/1950: Chile 33-37 Estados Unidos
Repechaje Ronda I
24/10/1950: Chile 40-24 Yugoslavia
Repechaje Ronda II
26/10/1950: Chile 54-40 España
Ronda Final
27/10/1950: Chile 48-44 Francia
30/10/1950: Chile 41-62 Argentina
01/11/1950: Chile 29-44 Estados Unidos
02/11/1950: Chile 51-40 Brasil
03/11/1950: Chile 40-43 Egipto
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De antemano, mil gracias!!!
Escrito por Daniel Arellano
Fuentes: FIBA Archive y Revista Estadio números 389, 390, 391 y 392
Foto principal: Archivo Sergio Montoya – Biblioteca del Básquetbol Chileno
Fotos: Revista Estadio